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Thursday, March 01, 2012

UNA PERIODISTA DE USA ANALIZA AL "GRUPO CLARÍN"

Al igual que mi posting más reciente, este es también un artículo tomado de In These Times. Esta vez es sobre el Grupo Clarín y su campaña contra la actual Administración argentina. Es un enfoque diferente, original... y más veraz. Aquí puede leerse el original en inglés.
Pulp Fiction en Argentina: el Grupo Clarín y la Libertad de Prensa
Una nueva ley para poner fin a un monopolio es condenada por los medios internacionales.
Por Julie Turkewitz*
BUENOS AIRES - En junio de 2002, cientos de argentinos se manifestaron en señal de protesta, pidiendo la ayuda del gobierno a raíz de una crisis económica que devastó la nación. La policía disparó fatalmente a dos jóvenes. Al día siguiente, Clarín, el periódico más grande del país, tituló: "La crisis causó dos nuevas muertes". El tono de los titulares –relevando implícitamente a la policía y al gobierno de toda responsabilidad- simboliza lo que Clarín ha hecho durante décadas: permitir que gobiernos corruptos y sangrientos se desligaran de sus crímenes.
La crisis que sacudió a Argentina hace 10 años ha terminado. Pero el Grupo Clarín, el conglomerado dueño del periódico, sigue siendo fuerte. La empresa controla el 50 por ciento de la circulación de diarios y revistas, así como la mayor red de televisión en América Latina. También controla Papel Prensa, la única compañía productora de papel para periódicos del país, lo que le permite vender papel a las publicaciones rivales a precios predatorios.
La Presidenta de Argentina, Cristina Fernández de Kirchner, propuso una ley diseñada para quebrar el control de Clarín sobre los medios y abrir vías a nuevas voces. La Ley de Papel Prensa declara “de interés público” la producción y distribución de papel de diarios y exige que la empresa se lo venda a todos al mismo precio. La idea es que todos los medios  tengan la posibilidad de publicar.
La ley, aprobada al final del año pasado, es parte de las grandes reformas sociales que incluyen favorecer a los más pobres y llevar ante la justicia a ex dirigentes de la dictadura de los años 1976-83. También es parte de un esfuerzo para corregir los males de la época: el Grupo Clarín le debe mucho de su éxito a la bien documentada complicidad con los dictadores argentinos. De hecho, el texto de la nueva ley incluye un extenso informe sobre la manera en que funcionarios corruptos posibilitaron que Clarín adquiriera la papelera.
Los partidarios de Fernández de Kirchner, incluyendo estudiantes, grupos de derechos humanos y miembros de las clases populares que se benefician de las nuevas reformas sociales, aplaudieron la nueva ley. Con su dominio en peligro, el Grupo Clarín ha puesto en marcha una campaña inteligente, acusando a la Presidenta de querer limitar la libertad de prensa. La campaña ha convencido a muchos periodistas extranjeros, incluyendo a reporteros de la Associated Press, de O Estado de Brasil y de El País de España.
Todos ellos han presentado los argumentos del Grupo en contra de la ley como si fueran hechos objetivos, advirtiendo que la “dictadura argentina” intentaba acumular “excesivo poder" (El País). La Associated Press informó que la producción de papel estaba ahora "bajo control del gobierno." (No es así, según el texto de la ley.) Y la Sociedad Interamericana de Prensa condenó los "intentos maliciosos por parte del gobierno de la República Argentina para controlar la libertad de prensa". El Grupo Clarín, a su vez, ha citado a estos informes en sus propias publicaciones, alardeando una falsa legitimidad.
Lo que muchos -dentro y fuera de la Argentina- han callado, sin embargo, es que gobiernos de todo el mundo desde hace mucho han limitado el poder de las compañías de medios. La aprobación de la ley sigue el paso de otra que limita el número de canales de televisión que puede poseer una compañía - ley criticada por Clarín, pero que es similar a regulaciones en vigencia en lugares como la Gran Bretaña y los Estados Unidos.
*Julie Turkewitz es una periodista que asumió el compromiso de explorar las raíces de la injusticia social a través de sus escritos, fotos y videos. Ha escrito para el Baltimore Sun y el Atlanta Journal-Constitution, ha trabajado en Tailandia y en Argentina –donde vivió en 2008 y 2009- y en los dos últimos años escribió sobre SIDA y sobre personas sin hogar para la fundación Housing Works.
Julie estudió Periodismo y Español y se graduó en ambas disciplinas en la Universidad de Carolina del Norte-Chapel Hill.
Actualmente vive en New York City.